Para crecer una empresa necesita conseguir clientes nuevos. Y para mantenerse también, ya que los clientes sólo son fieles al mejor postor.

En muy escasas ocasiones vienen solos, por lo que lo mejor es ponerse a trabajar para conseguirlos, puesto que en el mercado existen cientos, y hasta miles, de empresas con ofertas similares.

A eso se le llama prospectar, que consiste en la búsqueda de clientes potenciales interesados en lo que usted vende y que precisa de una técnica especial de comunicación.

Del tiempo que un vendedor dedica a tratar de conseguir clientes nuevos, la prospección se puede llevar entre el 60% y el 80% en función de varios factores, como el tipo de producto, la situación del mercado, el momento económico del país y la experiencia personal, entre otros.

Si a esto añadimos que la prospección no suele ser la actividad preferida de los comerciales, liberarlos de ella supone un múltiple efecto positivo que explicamos en la página RAZONES PARA PROSPEC, a la que puede acceder pulsando en el mismo nombre.

No estamos hablando de telemarketing, ya que ahí se intenta tan sólo conseguir una venta. En PROSPEC, en cambio, facilitamos el trato directo de
su empresa con los clientes potenciales de su mercado, favoreciendo la relación posterior que ustedes decidan tener con ellos.